Hola chicas!
Hoy vengo con malas noticias: Me han copiado la novela. ¿Lo mejor? La chica una vez fue mi amiga y encima niega habérmela copiado.
Así que si véis que me han quitado el tuenti, agregarme a Texe Styles Yellow sparks.
Bueno HOY ES EL CUMPLE DE TOMMO!!!!!!!!! Nuestro Boo Bear :'''') Agh, qué rápido crecen.
De cualquiero modo, FELIZ NAVIDAD A TODAS!
Os aviso de que este es un capítulo un poco tenso e.e , pero espero que os guste! Un bezito! ojkierooo!.
***
Narra HARRY.
¿Cómo podía haberlo hecho?
¿Cómo, si quiera, la había acogido entre mis brazos?
Debía haberlo parado en el mismo momento en el que nuestras
manos se rozaron. No debería haberlo dejado empezar, y mucho menos dejarla como
la dejé. Medio sin ropa y tirada en la cama.
Pero mucho más allá de ahí…Estaba mi mejor amigo que acababa
de ser apuñalado inocentemente. Ni si quiera podía levantar la cabeza del suelo
mientras iba a mi coche. Me sentía definitivamente como un monstruo. La última
persona a la que yo podría traicionar sería a Louis. La última. Porque él
siempre había estado en cualquier situación y ahora…Ahora había estado con la
única cosa que él nunca compartiría conmigo, y que yo, por supuesto no quería
compartir. Y ahora que ya estaba perdido, ¿qué debía hacer? ¿Qué se supone que
haces cuando besas sin querer y precipitadamente a la chica de la que tú mejor
amigo está enamorado? Era sin duda, lo peor que había hecho nunca.
Me mordía el labio inevitablemente ante mi grave error. ¿En
qué momento decidí pasarme por la casa de Lane, antes que por la de Louis? Lane
era totalmente la fruta prohibida, y en este caso, la fruta que yo nunca
hubiera querido probar. ¿Qué me había pasado ahí dentro? Ahí dentro no fui yo
mismo, ese no era yo.
Giré en la rotonda que llevaba a la casa de Louis totalmente
avergonzado. Sintiendo una terrible decepción y pena por mí mismo. Lo último
que se debía romper era una amistad, y yo la rompí en el mismo momento en el
que la toqué. Sin duda, Louis debía saberlo, y no por sentirme mejor conmigo
mismo, si no porque Louis tenía que saber que su mejor amigo era un
desagradecido sin autocontrol que la había cagado para siempre.
Por supuesto, esto no podía quedar así, se lo tenía que
contar a Louis, con el consentimiento de Lane, y sobre todo, tenía que hablar
con Lane. Es lo que menos me apetecía hacer pero algo nos llevó a hacer eso y
tendríamos que aclararlo, aunque ni se iba a repetir, ni Lane y yo volveríamos
a mantener ningún tipo de contacto tras esa conversación. Era totalmente
imposible.
Aparqué el coche y respiré hondo, poniendo mi cabeza en el
volante. Seguía sin poder
creérmelo. Caminé lentamente hasta la puerta de su casa, y llamé al timbre, como
siempre. Abrió la madre de Louis, Jay, que me dio un beso como siempre que me
veía, y me dejó ir a buscar a Louis.
Entré en su habitación y tenía la misma cara que hubiera
tenido si le hubiera contado lo que acababa de pasar. Estaba sentado en su
ordenador escribiendo, probablemente algún tipo de trabajo de clase, pero su
mirada no era la de Louis Tomlinson, porque Louis Tomlinson nunca estaba
apagado.
-Hola.-Dije, cuando entré.
-Oh, hola Harry, pensé que tardarías más. –Dijo él,
guardando el archivo y apagando el ordenador.
Louis se levantó y se sentó en su cama, mirándome como si yo
debiera hacer algo.
-Ah, sí. –Dije yo, buscando en el bolsillo de mi chaqueta.
–Te he traído el pendrive con las normas para el trabajo de tecnología.
Se lo di y me quedé quieto.
-Harry, siéntate, que estás en mi casa. –Dijo el mirándome
como si estuviera loco.
-Yo…Eh, sí, vale. –Dije sentándome.
-¿Estás bien? –Me dijo mirándome fijamente.
-Sí, simplemente ha sido un día…Extraño. – Contesté, sin
poder mirarle a la cara.
-Para mí también lo ha sido.
-¿Qué te pasa? Estás como...diferente, ¿te ha pasado algo? –
Susurré.
-Es solo que…Te va a sonar infantil, o exagerado, pero antes
Lane me ha llevado a solas para decirme que…que no. Que no podía ser. Y
simplemente ahora no puedo sentirme bien, no importa.
Otro factor más a añadir. Si esto no era suficientemente
malo, antes de que Lane me besara ya había dicho que no a Louis, y ahora Louis
estaba mal, y yo podría ser el culpable de ello. Tragué saliva con un nudo en
la garganta.
-Lo siento. –Dije casi en un suspiro, probablemente ese ‘’lo
siento’’ iba en otra dirección que él ni se imaginaba.
-No te preocupes, supongo que…Que se me pasará, aunque de
verdad pensaba que Lane era increíble, besarla fue genial, no me arrepiento de
eso. Siento hablarte de besarla Harry, pero es que no puedes ni imaginarte como
fue hacerlo. –Siguió hablando.
Sentí una punzada en el estómago.
-Pero bueno, supongo que es todo más fácil sabiendo que no
os lleváis bien, así no tendré que pasar todo el día con ella sin poder olvidar
lo que pasó.
Me aclaré la garganta.
-Sí…Supongo que eso es bueno. –Comenté. –Louis…No…no estés
pensando en Lane. No era para ti, y ya está, así que por favor no le des tanta
importancia. –Dije casi con desesperación.
-Lo sé, lo sé. –Dijo él, mirándose las manos. – Simplemente
dame unos días.
-Vale. –Dije. –Louis me tengo que ir ya.
-Vete, vete, te veo mañana, gracias por todo. –Dijo, con una
pequeña sonrisa.
‘’Gracias por todo’’. Esas palabras me rompieron poco a poco.
Salí de allí con un mal estar en el cuerpo que se me hizo muy pesado. Tenía que hablar con Lane
cuanto antes para aclarar las cosas con ella y poder contarle la verdad a mi
mejor amigo.
Narra LANE.
Me levanté alterada y sudorosa, debido a una horrible
pesadilla que había hecho que mi corazón se descontrolase totalmente. Sin duda,
irse a dormir totalmente confusa y nerviosa no había sido lo mejor, y debía
haberme tomado una manzanilla o algo para relajarme. Pero no lo hice, así que
miré el reloj y opté por ducharme rápidamente para quitarme la incomodidad de
estar sudando de encima.
Sin embargo, no podía quitarme de encima el malestar que
sentía y lo avergonzada y nerviosa que me sentía por ver a Harry aquel día. No
podía verle, simplemente tenía que ignorarle como fuera, no pensaba ni si
quiera dirigirle una mirada. Me sentía como si mi dignidad hubiera huido junto
con el beso a Harry.
Simplemente quería ver a Liam y abrazarle, porque él nunca
me preguntaría qué me pasa. Ese día no había quedado ni con Liam, ni con Dylan,
por razones que ni yo misma comprendía. Simplemente quería andar hasta clase, y
despejarme.
En cuanto llegué, busqué a los chicos con la mirada, y allí
estaban todos, Liam, Dylan, Niall, Zayn, Sheila, Elly, Louis…Y Harry. Liam me
dio un gran abrazo en cuanto me vio, y yo intenté no mirar a nadie fijamente a
los ojos y sonreír, sobretodo sonreír.
-¡Has aprobado física!-Me dijo Liam en medio del abrazo. –
Sabía que lo conseguirías.
Sonreí más aún cuando me soltó, y todos me felicitaron.
Bueno todos no, pero ocho de nueve lo hicieron.
-Ven Lane, que quiero decirte algo. –Me dijo Liam cogiendo
mi brazo y haciéndome andar.
Nos alejamos del grupo, para mi alivio, y me llevó al lado
de las taquillas.
-Mira. –Dijo, sacando una cajita del bolsillo. –Te he
comprado esto, por aprobar física, creo que te lo mereces. A parte eres una
gran persona y no sé, me apetecía regalártelo. Espero que te guste.
Cogí la cajita y la miré un momento. ‘’Te lo mereces, a
parte eres una gran persona’’. Las palabras resonaban en mi cabeza y a medida
que abría la cajita más daño me hacían esas palabras. Al abrir la caja vi un
precioso colgante de plata con una bola de cristal azul envuelta por un
enganche de plata. Era totalmente preciosa, pero realmente ni me lo merecía, ni
era una gran persona.
Narra LIAM.
Esperé ansioso su reacción. Podía presumir de que siempre se
me habían dado bien los regalos, ya que solía fijarme en mis seres queridos.
Además, yo solo quería animar a Lane, que últimamente había estado algo
apagada.
-Es…muy…-Sus ojos se llenaron de lágrimas y no pudo evitar
taparse la cara con una mano ante la incontinencia de las lágrimas, que salían
descontroladamente.
-Lane…-Dije yo, abrazándola automáticamente y frotando su
espalda. –No te preocupes Lane, todo va a estar bien, de verdad.
-No. –Contestó, con la voz rota. –No lo va a estar Liam.
Me separé ligeramente para poder quitarle las lágrimas de
las mejillas.
-Sí, sí lo va a estar. Cuéntame qué ha pasado. – Dije,
abriendo la puerta del baño de las chicas y metiéndome con Lane, importándome
poco quién pudiera vernos.
Lane se apoyó contra la pared y me miró insegura, y nunca,
nunca, Lane había temido contarme algo. En ese momento miles de sucesos
macabros pasaban por mi mente. ¿Qué podía ser tan malo que Lane no quería
contármelo? Ella…siempre había confiado en mí, ¿es que eso había cambiado
ahora? Me crucé de brazos intentando no mostrar lo inseguro que me sentía yo en
aquel momento. Con cada lágrima que salía de los ojos de Lane, yo solo pensaba:
‘’Vamos Lane, no te vengas abajo, no ahora, no tú. ’’
-Liam…yo…debí contarte esto en cuanto comenzó, y siento
mucho no haberlo hecho. Simplemente no quería…no quería aceptar que estaba
pasando, y ahora es todo un lío. –Dijo, quitándose algunas lágrimas más. –Y yo
no quería que pasara, no así, y no con Harry.
¿Con Harry? ¿Qué había pasado con Harry? ‘’Dios mío, Lane,
dime que no has hecho una locura, dime por favor que no has hecho una maldita
locura. ‘’ Eran palabras que ojalá pudiera gritar, pero Lane me necesitaba
tranquilo y yo no podría nunca hacerla daño en un momento tan frágil como ese.
- Todo empezó con las clases de física. Yo me sentía
increíblemente incómoda con Harry, increíblemente incómoda. Pero a la vez me
gustaba su presencia, y olía tan bien…Es un chico inteligente y se le dan bien
los niños, y de repente dejó de parecerme tan desagradable. Me gustaba su
presencia a pesar de algunas discusiones y descubrí que era…Una buena persona dispuesta
a ayudar a quien fuera dejando atrás las diferencias. Como el odio, en este
caso.
>>Y descubrí que había estado cuidando de mí en aquel
coche y aunque no lo quería admitir me gustaba aquello. Casi se pega con Eithan
por mí…era protector conmigo. Y me ayudaba, eso sobretodo. Aunque a veces, él
veía que había mostrado demasiado de sí mismo y se cerraba en banda y se
mostraba seco conmigo, casi distante, aún así yo sabía que había conseguido
algo.
Pero un día, inesperadamente Louis, que no tenía nada que
ver me confesó que me quería y me besó, y yo estaba totalmente confundida por
que ya había alguien que nublaba mis sentidos, aunque de nuevo no quería
admitirlo. Y tuve que decirle…que no. Con dificultad, porque adoro a Louis y es
una persona de diez. Todo un caballero y muy, muy dulce. Pero no le veía a él
así. Y ese mismo día, o sea ayer…Harry vino a mi casa a por su carta de
importación…Y nuestras manos se rozaron y…y…>>
Lane volvió a romper a llorar. Me acerqué a ella y volví a
abrazarla, para que supiera que no la estaba juzgando por nada, y que seguía
con ella aunque pudiera haberse acostado con Harry.
-Liam.-Dijo entre un sollozo. –Yo no quiero que Louis sufra,
no quiero que se entere, no quiero que Harry y Louis terminen su amistad, de
verdad, no quiero destrozar una relación por un simple beso que se descontroló.
-¿Pero acabasteis…?
-¡No!-Me cortó ella. –Faltó…verdaderamente poco, pero…no.
Aún abrazándola,
pensé en todo lo que me acababa de contar Lane. Y uní cabos. Por eso
Lane estaba tan agobiada y desconcentrada. Por eso no sonreía ni hablaba
apenas. Siempre iba con la cabeza gacha y alejada de Louis, Harry o Sheila.
-Lane, ¿te gusta Harry? –La pregunté suavemente, para
aclarar ese punto.
-No lo sé, en medio de ese beso descubrí que Harry no me
desagradaba en absoluto…y...y…ojalá pudiera decir que no me gustó. Siento no
habértelo contado, de verdad. Lo siento.
-No, Lane, no lo sientas. –La solté y la cedí papel para que
pudiera limpiarse la cara. – No te preocupes, todo va a salir bien. En cuanto
aclares las cosas con Harry…Podréis seguir como si nada.
Lane negó rápidamente con la cabeza y se mojó la cara para
refrescarla.
-De ninguna manera puedo volver a hablar con Harry. Esto
tiene que quedarse como está si no queremos liar esto más. Es mejor dejarlo
como está, de todas formas, Harry y yo nunca tuvimos una buena relación. –Dijo
ella, totalmente convencida.
¿Y yo qué iba a hacer? Era su decisión, ella sabía lo que
había pasado y cómo, y si ella creía que dejar las cosas como estaban era
mejor, yo sería el primero en apoyarla en sus decisiones.
Narra LANE.
Conseguí calmarme del todo gracias a Liam que me apoyó
silenciosamente durante todo el día. Consiguió milagrosamente mantenerme con
una sonrisa en la cara gracias a sus chistes malos, y pude ver como
verdaderamente se esforzó para que yo no tuviera ni el mínimo contacto con Sheila,
Harry o Louis, y para no mostrar ningún sino de tristeza.
Liam se ganó un puesto en el cielo en el mismo momento en el
que se esforzó tantísimo porque yo estuviera bien. Pero aquel día era el día en
el que teníamos la fiesta en casa de Harry, y en la que dormiríamos allí. Y
Liam no podía pretender cuidar de mí durante tantísimas horas, pero sin
embargo, totalmente relajada, en medio de la cafetería y mientras todos
hablaban, sonreí verdaderamente por primera vez aquella semana, y besé a Liam
en la mejilla, totalmente agradecida por tener al mejor chico del mundo en mi
vida.
***
‘’Lane, tenemos que hablar. Nos vemos esta noche.
-Harry.S.’’
Quité la nota de mi cuaderno de física rápidamente deseando
que nadie la hubiera visto. Me senté en el asiento y me guardé la nota en el
bolsillo. Lógicamente mi compañero de pupitre no podía haber visto la nota
porque mi compañero de pupitre era Harry Styles, y Harry Styles no había
acudido a física ese día. Fue totalmente un alivio para mí que no tuviera que
sentarse a mi lado aquel día, por que sin duda hubiera sido una de las peores
clases de mi vida. Sin embargo no podía evitar preguntarme el por qué de su
falta, y mucho más allá de eso: Tenía que evitar a Harry totalmente en la
fiesta.
Narra HARRY.
Me encontraba en el despacho de la jefa de estudios, ya que
me había llamado para hablar cobre la carta. Yo ni la había abierto, así que no
tenía ni idea de lo que iba a pasar en aquel momento. Ella me miró esperando a
que abriera la carta y la leyera, y eso hice. La abrí poco a poco, aun que ya
sabía que se trataba sobre mi beca.
‘’Estimado Sr.Styles, como bien sabrá, ha sido usted
aceptado en la Universidad de Western Ontario, Londres, en la capital de
Ontario, en el país de Canadá para realizar artes y biología.
Debe usted rellenar algunos requisitos adicionales que no le
llevaran demasiado tiempo, solo tiene usted que pasarse por el reverso de la
hoja.
Un cordial saludo: Jack McFlannagan. Director y coordinador
de la Universidad de Western Ontario. ’’
-Vaya. –Dije. –No sabía que necesitaran más datos míos, creí
que los había cubierto todos en la beca original.
-Lo sé, no te llevará mucho tiempo, puedes hacerlo ahora si
así lo deseas, Harry.
Asentí con la cabeza y cogí un bolígrafo que me cedió la
jefa de estudios, para rellenar aquel pequeño papel.
-Perdón que me meta en tus asuntos Harry pero… ¿Te irás a vivir a Canadá?
-Supongo. Es lo mejor, ¿no?-Dije, pensando en ello.
-Sí, es solo que bueno, tienes amigos aquí en Reino Unido, y
bueno no solo te cambias de país, si no de continente. ¿Crees que llevarás bien
separarte de tus amigos?
-No quiero…Prefiero no pensar en eso ahora. –Dije, evitando
su mirada y rellenando el papel.
-Por supuesto, lo siento Harry.
*Narra LANE*
Preparé un pequeño neceser en el cual metí ropa interior,
zapatos planos, cepillo de dientes, cepillo del pelo, colonia y ropa para el
día siguiente, y la dejé encima de la cama. Aunque ir a esa fiesta y pasar la
noche en casa de Harry no era lo que más me apetecía, tenía que echarle
narices. Evitar a Harry, lo cual era cobarde, pero no acobardarme.
Elegí ropa bastante simple, pese a que elegí un par de
tacones por ser viernes.
Dejé mi pelo ondulado como de costumbre, y de maquillaje
utilicé un poco más que de costumbre, me maquillé los párpados y las mejillas,
y me eché pintalabios, algo que no hacía a menudo. Cogí mis cosas, me despedí
de mi madre, y salí de casa. En la calle hacía frío y ya había oscurecido, por
lo que caminé lo más rápido posible.
Llegué allí y Harry me abrió la puerta. Le saludé
amablemente para no parecer incómoda y entré, encontrándome a todos menos a
Sheila y Louis que aún no habían llegado. Mi cabeza no paraba de dar vueltas a
las cosas y empezaba a tener ideas imposibles sobre el por qué de que fueran
Louis y Sheila y no otros los que faltaban, pero intenté relajarme, y cogí un
vaso de algún tipo de alcohol que había en la mesa, ya que realmente no me
importaba. Tristemente, me fiaba de Harry y sabía que él no pondría nada malo.
Pude relajarme y reírme gracias a que Elly permanecía haciéndome bailar, y
debido a la chispa del alcohol, todos estábamos más alegres.
Cuando Sheila y Louis llegaron, Harry puso la mesa y la
comida con nuestra ayuda. Y debía decir que cocinaba bien, realmente bien.
Notaba las miradas de reojo de Sheila, y por algún motivo,
me intimidaban. Lo único que quería evitar eran problemas, y las miradas de
reojo de Sheila no me lo facilitaban para nada. ¿Qué sabía ella? ¿Por qué me
miraba así? Miré a Louis, el cual no paraba de hablar con Harry alegremente, y
Harry, le evitaba las miradas. Era todo extremadamente tenso: Sheila me miraba
a mí, yo miraba a Louis, Louis hablaba con Harry, Harry evitaba a Louis, Liam y
Elly se miraban entre ellos…Y bueno, Zayn y Niall y Dylan eran ajenos a todo.
La cena se hizo bastante incómoda, así que evité hacer movimientos obvios.
Narra HARRY.
Tras la cena, recogí todo rápidamente, y volví con los
chicos para coger una copa. Lane y Elly bailaba, y me di cuenta de que Sheila
se mantenía alejada de las chicas, riendo y jugando con Louis, Niall, Zayn,
Liam y Dylan, lo que no me gustó nada. Algo iba mal con Sheila.
Pero no podía preocuparme por Sheila en aquel momento cuando
tenía que hablar con Lane. Esperaba que hubiera leído mi nota, por que no
podíamos retrasar la charla.
La miré intencionadamente pero ella nunca me devolvió la
mirada, así que tuve que ir a buscarla sin que Louis, ni Sheila se dieran
cuenta.
-Lane, ¿puedes venir? –Dije, intentando no mirar a Elly.
Parecía que todos ahí excepto Niall, Zayn y Dylan sabían lo
que pasaba, y me ponía nervioso no poder preguntarle a nadie.
-Yo…Es que estoy bailando. –Dijo ella, intentando darse la
vuelta.
-Ya.-Dije, cogiéndola de la mano y dándola la vuelta. –Pero
es urgente.
-Venga ve Lane, yo te espero aquí. –Dijo Elly cogiendo otra
copa y caminando hacia el otro grupo.
Lane miró a Elly con desesperación pero me siguió cuando yo
comencé a caminar. Subí las escaleras y llegué hasta mi habitación, dejando a
Lane entrar primero.
-No sé…No sé de qué quieres hablar Harry. No creo que
tengamos nada de lo que hablar. –Dijo de espaldas a mí.
Había notado cómo me había evitado durante toda la fiesta y
cómo ahora intentaba evitarme, pero esta vez no lo conseguiría.
-Sabes que sí. Lane…Sabes que…
-Que esto no debería haber pasado. Lo sé.
-Exacto. –Contesté. No sabía cómo expresarme.
-Mira Harry…-Dijo Lane, pero unos golpes a la puerta la
cortaron.
-¿Hola? ¿Harry estás ahí?-Era la voz de Louis al otro lado
de la puerta.
Lane y yo nos miramos
con horror y la señalé el armario. Ella corrió hacia allí, y yo corrí detrás de
él escondiéndome dentro con ella. El armario no era muy espacioso, o por lo
menos no para que dos personas se metieran dentro. Y por si hablar con Lane sobre
lo que pasó no fuera suficientemente incómodo, cuando nuestros pechos chocaron
debido al poco espacio y podía escuchar perfectamente su respiración debido a
lo cerca que estaba, supe que sí que podía haber momentos más incómodos.