martes, 23 de abril de 2013

Capítulo Veintinueve.

HOLA CHICAS!
LO SIENTO! Sé que he tardado SIGLOS en subir pero he pasado una época dificil y ahora que estoy bien tengo energía para escribir 1000 cosas! (de hecho, he empezado una novela en Inglés, lo cual es mi mayor logro en la vida :3)  Y ESO. Sí, solo queda un capítlo más. SOLO UNO. La próxima vez que suba será para terminar la temporada :( PEROOOOO como dice Lou live in the moment because everything else is uncertain :3
Y eso.
Esta vez os dejo una cover mía cantando Wayfaring Stranger de Ed Sheeran, espero que os guste! 

Gracias por ser pacientes y seguir aquí, y gracias por las casi 29000 visitas! :) OS quiero!
                                                                ***


Me levanté de la mesa de mi clase de la autoescuela y entregué mi primer examen. La suerte estaba echada. Y en ese momento mi mente tenía que pasar a otra cosa, y esa cosa era Elly. Cogí mi bolso-bolsa y me encaminé con paso rápido hasta el hospital. 

Fui directamente hasta su habitación ya que Liam me había dicho qué número era.  Llamé a la puerta con cuidado, y cuando la abrí, me encontré un círculo de mis mejores amigos alrededor de una camilla de hospital. Allí estaban Dylan, JJ, Izan, Niall, Zayn y Liam.

-Oh, ¿en serio? Dejarme verla,  idiotas. –Dije con tono de enfado.

Los seis me miraron y empezaron a reírse. Liam me hizo un hueco entre Niall y él y me puse en medio de los dos.

-Hola, Elly. –La dije dándola un abrazo suave.
-¡Lane! Te echaba de menos. –Dijo con una risita.
-Yo también a ti. –La sonreí.- Mira lo que te he traído. 

Todos nos prestaban atención. Yo cogí mi bolso-bolsa y saqué de él una gran bolsa de regalices de todos los colores y ositos haribo. Se los di y ella empezó a reírse a carcajadas.

-Me encanta. –Dijo abriendo la bolsa de regalices y cogiendo uno rosa. -¿Queréis?

Todos cogimos un regaliz y en ese momento yo me fijé bien en su cara. Estaba aún un poco pálida y tenía unas ojeras que normalmente no tenía. Pero por otra parte, su cara era más o menos saludable. Me pareció algo extraño. 

-Bueno, ¿y qué te han dicho? –Dije, como que no quería la cosa.
-Mañana me dan el alta. –Dijo con alegría. –Y menos mal porque este sitio es horrible. La primera noche fue horrible. Luego Liam se quedó a dormir y ya no fue tan horrible. –Elly sonrió con dulzura a Liam. Y Liam apretó con suavidad la mano de Elly que no había soltado desde que había entrado por la puerta.

Me sentía como si siempre tuviera que cuestionar si sabía toda la información o no. Pero realmente pensaba que había algo en esta situación que no era normal. Había algo que Liam no me había contado. Y lo podía saber no solo por su expresión pensativa, si no porque no había hablado en todo el rato.  Pero solo Liam estaba callado, Elly estaba mejor que Liam. Probablemente era una información que solo Liam tenía, o que a Elly no la preocupaba. Pero aunque conocía bien a mi mejor amigo, no iba  a presionarle, ni si quiera iba a sacar el tema, porque veía el cansancio en la cara de Liam, y no me refería al cansancio físico. Si él quería contármelo, ya lo haría. 

Liam me cogió de la mano silenciosamente. Y la apretó con fuerza. Me asusté. La última vez que Liam me había cogido de la mano fue en agosto, cuando estuvo a la espera de los resultados que le dirían si su riñón estaba bien o no. ¿Qué coño estaba pasando? Le devolví el apretón para que supiera que le apoyaba aunque no tuviera ni idea de lo que pasaba. Así que era grave, supongo. Liam estaba nervioso, y eso me preocupaba. 

Tras estar un buen rato con Elly, era la hora de irse, y Liam aún no me había soltado la mano. Rezaba porque me lo contara y tuviera solución.

-¿Quieres que te lleve a casa? –Me dijo Liam cuando todos empezaron a despedirse de Elly. Asentí con la cabeza. –Vale. 

Me acerqué a Elly y la abracé con suavidad de nuevo. 

-Adiós Elly, pasa buena noche. –La besé en la mejilla.
-Eso espero. –Dijo, aún con la sonrisa en la cara.

La sonreí de vuelta y me aparté para observar a Liam. Liam se agachó y la dio un suave beso en los labios y la abrazó por unos segundos. La dio un suave apretón en la mano y la sonrió, y se despidió por última vez. Era increíble cómo Liam escondía sus preocupaciones a Elly, pero no podía hacerlo conmigo. 

Salimos de la sala, y cada uno se fue por su lado, tras valorar el estado de Elly, pero por supuesto, Liam no dijo nada. Después de despedirnos de nuestros amigos, Liam y yo caminamos hasta su coche. Me daba miedo preguntar, así que cerré la boca.

Él encendió el motor y comenzó a conducir. Soltó un gran suspiro.

-No tengo nada de ganas de volver a mi casa. –Susurró.
-Pues vente a la mía. –Dije, sin pensármelo dos veces. -¿Por qué no quieres volver?
-Porque me avasallarán a preguntas que no me apetece contestar porque estoy muy cansado. –Dijo, saltándose un semáforo en rojo.
-Vale, pero no hagas el tonto, que estés enfadado no quiere decir que tengamos que morir en la carretera.
-Pero estaba la calle vacía. –Se quejó. -¿Me puedo quedar en tu casa entonces?
-Claro. –Le aseguré. –Yo no te obligaré a que me contestes a preguntas.
-Lo sé. –Dijo, mirándome un momento para sonreírme.
-Ai Liam. –Suspiré levantándome de mi asiento y dándole un beso en la mejilla. ¿En qué lío se habría metido ahora?

                                                                            ***

Sonó el despertador como cada mañana, solo que esta vez me desperté con una sensación de seguridad en mi cuerpo. Me sentía calentita y a gusto, no tenía estrés, ni preocupaciones. Me di cuenta de que era porque estaba durmiendo con mi mejor amigo. Y volvieron mis preocupaciones cuando me acordé de todo lo que había pasado en esa semana. Ese día era el gran día. Ese día por fin mataríamos dos pájaros de un tiro con Eithan. Levanté un poco la cabeza y mí la cara de Liam de lleno. Seguía dormido. No nos habíamos rozado en toda la noche lo cual era extraño porque Liam casi siempre me tiraba de la cama o me dejaba en una esquina. Sin embargo, esa noche había dormido mejor que muchos otros días. 

Moví suavemente a Liam y él comenzó a abrir lentamente los ojos. Los entrecerró debido a la luz y soltó un quejido. Me reí.

-Levántate o llegaremos tarde a clase. –Dije, y con voz dramática añadí. –Y hoy es el último día, Leeyum, ¡el último día!

Oí su risa y se estiró en la cama. 

-Sí que estás animada. –Dijo con voz somnolienta.
-¡Porque grandes aventuras nos esperan hoy! –Dije levantando el puño en el aire con más dramatismo.

Liam siguió riendo y se sentó en la cama.

-Buenos días. –Me dijo.
-Buenos días. –Le contesté. –Voy a ducharme rápidamente, si quieres desayunar ya sabes dónde está mi madre y si quieres ducharte espera cinco minutos. 
-Como cada vez que vengo. –Levantó una ceja.
-Exacto. –Dije, saliendo de la cama y cogiendo mi ropa para meterme al baño. –No tardo, ve a desayunar si quieres. 

Asintió con la cabeza y yo me metí en el baño. Me duché y vestí rápidamente y me sequé el pelo con más rapidez aún. Salí y Liam estaba en mi habitación con la ropa cambiada y totalmente despejado. 

-Ayer hiciste el primer examen de la autoescuela, ¿verdad? –Dijo, sentándose en la cama. Asentí con la cabeza. -¿Qué tal te salió?
-Yo creo que bien, no estoy preocupada. Hoy tengo el otro. –Comenté.
-Por fin te sacarás el carnet. –Dijo con una sonrisa. –Ven, siéntate, tengo que hablar contigo.
Supongo que me iba a contar lo del día anterior, así que me senté a su lado y le miré fijamente.
-Supongo que ya te habrás dado cuenta. –Dijo.
-Sólo de tu humor ayer. –Contesté. –Sinceramente ni se me pasa por la cabeza lo que puede estar pasando.
-Bueno, pues voy al grano. –Dijo. –No es un tema fácil ni nada que me agrade y quiero soltarlo lo antes posible, Elly no es anémica.
-¿Cómo que no? –Dije con confusión.
-No. Quiero decir, sí, ahora está anémica pero su estado natural no es ese. Tiene mareos, anemia, está cansada, apenas puede caminar, no la viene el periodo…-Fue enumerando los síntomas. –Elly tiene anorexia.

¿Qué? ¿QUÉ? Me quedé callada. ¿Anorexia? Liam me miraba con cautela, esperando a que reaccionara. En ese momento comprendí muchas cosas. No supe que decirle, así que simplemente le abracé.
Liam me devolvió en abrazo y respiró hondo. Me dio la impresión de que le agradaba más la idea de ser padre que la de que su novia fuera anoréxica. 

-¿Sabes? –Dijo, con la cabeza apoyada en mi hombro. –Me duele saber que podría haberlo notado antes, que no tendríamos que haber llegado al extremo en el que Elly acabara en el hospital. Y ella no sabe que lo sé, pero aún así, Elly va a salir de ahí. Vamos a clase, anda. 

Se separó de mí y se levantó de la cama. Yo tenía muchas cosas que decir, pero él no estaba de humor para preguntas y tenía que respetarlo. Pero sin duda, había entrado en shock.

                                                                      ***

-Vale. –Dijo Liam, bajando del coche después de aparcar. –Voy a hablar con Dylan, creo que tenía más planes sobre lo de hoy. –Se paró frente a mí en medio del aparcamiento y me cogió de los hombros. -¿Segura de que quieres hacerlo? 

Asentí con la cabeza. Él me copió e hizo lo mismo, y después me abrazó.

-Hoy todo va a salir bien, ya verás. –Dijo en medio del abrazo. Me besó el pelo y se separó. –Voy a buscar a Dylan, ¿vale?

Asentí de nuevo y me quedé apoyada en el parachoques del coche de Liam. Cuando él se fue, en el momento en el que él entraba por la puerta, Louis, Sheila y Harry salían por ella. Ninguno se habló. Harry caminaba mirándose los zapatos mientras Sheila le murmuraba algo a Louis. Se me hizo un nudo en la garganta. Harry levantó la cabeza y tras mirar un rato al frente me vio. Les dijo algo a Louis y Sheila, que se miraron entre ellos y asintieron con la cabeza. Harry se fue de ahí y caminó hacia mí. Sheila y Louis fueron por otro camino. El nudo en mi garganta se hizo más grande. No tenía forma de huir ni de hacer tiempo, Harry me había visto, y yo había visto a Harry, y lo peor es que él sabía que le había visto. ‘’Lane, da la cara de una vez. ’’ Mi subconsciente me dio una puñalada por las espalda, pero tenía razón, tenía que dar la cara.

-Hola. –Dijo Harry, parándose justo enfrente de mí. 

Yo me quedé apoyada en el capó del coche de Liam con las manos metidas en los bolsillos de la chaqueta como si no me importara demasiado, pero realmente estaba a punto de ponerme a temblar.

-Hola. –Mi voz sonó demasiado baja, me aclaré la garganta. 
-¿Podemos hablar? –Dijo,  mirándome con cautela. 

Asentí con la cabeza sin pensármelo. ¿Entonces acababa de llegar el momento? ¿Por fin Harry sería sincero conmigo? 

-¿Te pasa algo conmigo? –Dijo, y luego movió la cabeza a un lado. –Quiero decir…Nunca nos hemos llevado bien pero después de estos días que no han estado…del todo mal, ¿te pasa algo? Un día me dices todo lo que piensas y al día siguiente te alejas, es muy confuso.

‘’ ¡Tú me hacías lo mismo!’’ .Me guardé el comentario ya que Harry se había interesado por mí. Le preocupaba. Sentí un hormigueo subir por mis brazos y piernas, y tragué saliva. Era la hora de ser sincera. Era todo o nada.
Cogí aire y él cambió su peso de un pie al otro, él también sabía que había llegado la hora.

-Desde que…desde lo de Sheila, han cambiado mucho las cosas, tú lo sabes. –Le miré y él asintió con la cabeza. Ya tenía su atención, por lo que continué.

>> Ese día fue el mejor día que tuvimos…Ya que por una vez no peleamos, y bromeamos y quedamos en ser amigos y eso me gustó, tú dijiste que pasaría lo que tuviera que pasar lo que en un principio me pareció bien. Pero luego…Luego te juntaste con Sheila, me dio mucha rabia porque yo quería que estuvieras en el grupo en el que yo estaba…Y en el fondo sabía que te ibas porque Louis iba. Y Louis iba porque Sheila ya había estado comiéndole la cabeza desde mucho antes. Pero eso no quitó que me molestara, y después os quedasteis aparte, os alejasteis y eso me dio desconfianza, no sé qué pensar de ti pero está esta parte de mí que quiere creer todo lo que dices y que quiere responder a todo lo que pienso y dudo de ti. Pero simplemente no puedo si no sé la verdad sobre lo que piensas. Necesito saber qué es lo que piensas y qué es lo que está pasando.

Me miraba fijamente a los ojos y eso me intimidaba, pero no aparté la mirada en ningún momento, ya que Harry realmente no me estaba mirando, estaba pensando en todo lo que le había dicho. Seguro que no se esperaba algunas cosas. Yo sentí que el nudo de mi garganta había desaparecido. Solo sentía una desagradable sensación de nerviosismo en mi pecho, y la culpa solo era de la simple presencia de Harry. Recordé que Harry no tenía ni idea del plan que teníamos contra Eithan, y tampoco se lo conté. 

-Lo cierto es que yo no encajo ahí. –Dijo, tras un momento de silencio. –Estoy con Louis porque es mi mejor amigo, pero sé que yo ya no soy el suyo. Realmente no sé por qué estoy allí, igual es porque pienso que ya no queréis que volvamos ninguno de los tres. No me gusta lo que Sheila ha hecho con Louis y tampoco yo sé que es lo que Sheila le ha hecho, así que no puedo decirte qué es lo que pasa, porque yo tampoco lo sé.

¿Así que Harry no tenía nada que ver con ellos? Un gran alivio se mezclo con una sensación de rabia. No quería que Louis saliera perjudicado pero ya era demasiado tarde.

-¿Eso significa que…Louis y tú ya no sois amigos? –Pregunté.

Él se encogió de hombros y no dijo nada, pero parecía como si le doliera de verdad.  Se me revolvió el estómago.

-Yo…No quería. –Dije, notaba mis ojos húmedos y el nudo en la garganta había vuelto. – No quería hacer daño a Louis, y menos romper vuestra amistad. Ni siquiera…Me esperaba esto. Joder. –Me tapé la cara con una mano. –Esto se podría haber evitado. 

El timbre sonó pero no me moví del sitio ni cambié de postura. Harry tampoco se fue. Noté como Harry me abrazaba poco a poco y yo no sabía qué hacer, me sentía peor aún ahora. Tenía la cara hundida en el pecho de Harry, y él tenía la barbilla apoyada en mi cabeza.

-Lo he destrozado todo.-Dije con voz ahogada por las lágrimas. –He hecho daño a una persona y he destrozado lo que fuera que tuvierais durante años. No sé ni cómo puedes seguir hablándome.
-No te culpes.-Oí que decía, mientras frotaba mi espalda para animarme. –Yo tampoco he actuado bien.
-¡No hagas cómo que no te importa! –Dije, intentando apartarme de él, pero no me dejó. – No hagas como si te diera igual que Louis se haya alejado por mi culpa, en vez de abrazarme a mí deberías estar intentando arreglar vuestra amistad. Eran años Harry y lo he estropeado. Es imposible que no te duela. ¿Por qué estás aquí conmigo en vez de con él?

Seguía con la cara hundida en su pecho y cada vez me sentía peor. ¿Cómo podía haberme elegido a mí? 

-Porque no me sentiría mejor con ninguna otra persona en este momento. –Susurró.

Eso me hizo llorar más.

-¿Te duele? –Le dije. –Lo de Louis.

Se calló durante un momento y noté cómo suspiraba, creo que ese era el abrazo más largo que nadie me había dado nunca.

-Sí. –Contestó en voz baja.

Sentía cómo si me estuviera ahogando. Dos personas estaban sufriendo por mí. Era un monstruo, no me merecía que nadie me tratara bien.

-Harry, por favor, suéltame. –Le dije sollozando. Mi voz sonaba débil y llorosa. 

Él suavizó su abrazo hasta que pude separarme de él. 

-Ve con Louis, Harry. Soluciona las cosas con él ahora que puedes, dile lo que ha pasado entre nosotros y no vuelvas a hablarme. No merece la pena que dejéis de hablar por mí. Ni siquiera me conoces lo suficiente y yo…yo…–Dije, no sabía ni qué decir, sólo quería que Louis y Harry fueran amigos y me odiaran de por vida porque me lo merecía.

No me atrevía a mirarle a la cara, nunca me sentiría bien conmigo misma después de esto. 

-Lane…-Le oí decir a Harry.
-No intentes buscarle una solución, esta vez no la hay, lo siento. –Contesté.
-¿Eso es lo que quieres? ¿Lo que quieres es que después de todo, esto se quede en nada? –Estaba susurrando, ni si quiera levantó la voz.

Me hizo dudar. Solo quería volver atrás en el tiempo y no haber destrozado una amistad.

-¿Qué es lo que quieres tú? –Le contesté. Harry  también importaba. 

Harry me sujetó la barbilla con la mano y me levantó la cabeza, de modo que ahora él me miraba fijamente.

-Lo que me haga sentir bien, y en este momento tú me haces sentir bien. –Dijo.

Se me debilitaron las rodillas en aquel momento, no sentía que fuera real, no podía creérmelo. Pero se sentía tan bien imaginar que Harry me quería.

Le abracé con fuerza y él me devolvió el abrazo.

-Esto está muy mal. –Le dije, intentando consolarme en aquel abrazo.
-Está fatal, pero ya lo solucionaremos.-Me contestó, apretándome fuerte contra él.

*****Lo siento, el gif no cargaba D:

11 comentarios:

  1. Me encanta!!!! esta genial enseriooo y porfis no tardes tanto en subir que me muero de ganas de saber k pasa entre estos dos y con Eithan muchos besos y sigue escribiendo así de bn :)

    ResponderEliminar
  2. Necesito el siguiente *-* Escribes genial, me encanta asdfgh *-*

    ResponderEliminar
  3. He pensado en escribir alguna novela, la tuya me fascina!

    ResponderEliminar
  4. Me encanta tu novela! Siguela pronto porfa :)

    ResponderEliminar
  5. Siguiente por favor adoro tu novela!!

    ResponderEliminar
  6. Has dejado la novelaaaa? Es que hace muchiiisiiiiimo tiempo que no subes y no me gustaria nada nada nada que la hubieras dejado porque me encanta la novela y como escribes que es muuuuuuuy muuuuy cuquiiiiiiii. Pliiiis no dejes la novela que necesito saber que pasa a partir de ahora con Lane y Harry!! Por favooor sigueeeee.

    ResponderEliminar
  7. A VER CUÁNDO SUBES YA, EH.
    Necesito sabeeeer qué pasa con Lane. Es demasiado asdfghjklñ por favor, sube!

    ResponderEliminar
  8. Cuando vas a subir más??? Llevas muchísimo sin subir nada :(

    ResponderEliminar
  9. Holi soy nueva lectora y me encanta la nove pero ya pasaron 10 meses y todavía no subistes el ultimo capitulo, lo vas a subir? Que paso que no escribes mas desde abril? Por favor subilooo escribes muy lindo como para dejar esta nove sin final... Bueno chau espero que subas el capitulo que falta.. Besos linda.... xx abril

    ResponderEliminar